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Tradicional de Uruguay y Argentina, la yerba mate se está empezando a expandir por todo el mundo
Con siglos de historia, la yerba mate se está popularizando en Europa tras ser la bebida más popular de gran parte de Sudamérica. Descubre su origen, cómo se elabora y la rivalidad entre Uruguay y Argentina en torno al mate.
| 08 Abril 2020
La globalización nos ha permitido poder disfrutar de productos con los que, hasta hace nada, no podíamos ni soñar. Comidas y bebidas originarias de lugares que están a miles de kilómetros pasan por nuestros supermercados o nuestra cocina con naturalidad. Un ejemplo de esto, que como todo, tiene sus cosas buenas y sus cosas malas, es la yerba mate, una infusión hecha a base de hojas y ramas del Ilex Paraguariensis, árbol típico de la selva paranaense, territorio que ocupa tres países: Argentina, Brasil y Paraguay.
Antes de adentrarnos más en la tradición hay que hablar de cómo se bebe el mate y de un par de conceptos básicos. El tradicional recipiente circular en el que se vierte la yerba y el agua se llama calabaza, y la caña metálica que se utiliza para beberlo bombilla. Una vez sabido esto podemos ahondar más en esta centenaria infusión.
El origen de la yerba mate
El origen del mate se remonta a los nativos guaraníes, quienes utilizaban las hojas del árbol para múltiples funciones: como moneda de intercambio, como objeto de culto... o como bebida. A pesar de que también las mascaban, lo más común era beber el mate con la calabaza.
Cuando llegaron los conquistadores españoles, no tardaron en quedarse prendados de este producto, y lo dieron a conocer por todo el continente y a aumentar su producción. Aunque no diera el salto a Europa, el mate comenzaba a consolidarse como la bebida principal buena parte de Sudamérica.
La rivalidad entre Uruguay y Argentina: ¿qué mate es mejor?
Uruguay, pese a no producir su propia yerba, es junto a Argentina los países a los que más asociados está el mate para el gran público. En estos dos territorios separados por el río de La Plata, el mate trasciende de ser una bebida y se convierte en ritual social, en una señal de identidad, en algo que, en definitiva, aumenta el sentido de pertenencia a un pueblo, a una cultura.
Sin embargo, a los rioplatenses con esta yerba les pasa como con Carlos Gardel, quien les une por el gusto por su música y les separa por el debate de su lugar de nacimiento. En el caso del mate, la confrontación viene dada por su proceso de elaboración y cómo lo consumen cada uno.
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Diferencias entre el mate uruguayo y el argentino
El momento clave en el conflicto llega en lo que se llama la molienda, el proceso de separación de la yerba en palo, polvo y ojos. Es decir, el paso en el que se define buena parte del sabor final. Los argentinos prefieren el mate con palo, los uruguayos sin palo. El primero es un mate más suave, preferible si nunca lo has probado y te quieres iniciar; el segundo se caracteriza por ser más fuerte e intenso.
Otro aspecto que les diferencia es que, a la hora de cebar el mate (añadirle agua a la infusión), los charrúas prefieren hacerlo desde un termo y los argentinos desde una tetera. Al empezar a beberlo, los primeros mueven la bombilla, a la que colocan recta a medida que lo consumen, mientras que los segundos tienen por tradición ponerla con un ligera inclinación y sin poder moverse para nada.
No obstante, todas estas diferencias hay que entenderlas como preferencias generales y no como normas sectarias. De hecho, la presencia del termo es uno de los culpables indirectos de la expansión del mate, mucho más fácil de encontrar y muy visible entre los deportistas sudamericanos, que llevan su termo y su bombilla antes de un partido o evento, lo que ha provocado que muchos se decidan a probarlo y queden encantados con la experiencia.
Como hemos dicho, Argentina y Uruguay no son los únicos con tradición de mate. En Paraguay, por ejemplo, también lo beben. Allí se llama tereré, se toma frío e incluso se le añaden frutas exprimidas. En Brasil, en cambio, se le llama chimarrao, es sin palo y con mucho polvo y se toma caliente, como en los dos países rioplatenses.
Cómo preparar el mate
Con toda esta información ya estás más que iniciado en el mundo del mate y en todo lo que supone. Solo te falta elaborarlo, y en Menzig te explicamos cómo hacerlo:
- Mientras se calienta el agua, echa la yerba en tu calabaza y sacúdela para quitarle el exceso de polvo tapando con la mano el recipiente y dándole la vuelta.
- Coloca en un ángulo de 45º la calabaza y echa un poco de agua tibia en la parte que quede sin yerba. Déjala reposar un par de minutos y después introduce la bombilla en la parte mojada, tapando su orificio para que no se bloquee. Después absorbe el agua (hay gente que luego escupe ese agua, pero esto es opcional). Esto se hace para que el mate no se queme cuando entre en contacto con el agua caliente.
- Una vez lista el agua caliente, ve cebando la yerba siempre por la parte en la que al principio hemos vertido el agua tibia, y con mucho cuidado de que no se cale la otra mitad, a la par que disfrutas del sabor de tu mate. Seguro que pronto te vuelves un adicto más a esta infusión.