'Toy Story 4', 'Pokémon: Detective Pikachu', Shutterstock
12 de noviembre de 2018, el día en el que los millennials recuperaron su infancia para regresar después a la cruda realidad
El lunes 12 de noviembre no fue un lunes normal, aunque terminó con el mismo sentimiento gris que todos los demás. Primero nos ilusionó con los tráilers de 'Toy Story 4' y, sobre todo, de 'Pokémon: Detective Pikachu', para más tarde hundirnos con la muerte de Stan Lee. Pero al menos podemos sacar varias reflexiones sobre estos acontecimientos.
| 15 Noviembre 2018
No hay nada peor que los lunes. Sí, sé de sobra que es una afirmación repetida hasta la saciedad, pero es que nadie podrá discutirme que es algo cierto. Si una mentira repetida mil veces se convierte en realidad, ¿qué podemos decir de una verdad? Y la de los lunes es una certeza irrefutable.
Pero hay lunes que son menos lunes, en los que afrontar el día (y la semana que lo acompaña) cuesta menos. El del 12 de noviembre es el ejemplo perfecto, o al menos lo era hasta que volvimos a darnos de bruces con la realidad, la de que no hay lunes bueno, con una noticia que nos borró la sonrisa de la cara de manera fulminante.
Comer con 'Toy Story 4' con la esperanza de no atragantarnos
Pero no adelantemos acontecimientos. Más o menos a la hora de comer en España, Disney Pixar se propuso lograr que los millennials dejáramos de lado durante minuto y medio nuestras preocupaciones estudiantiles o laborales y nos centráramos en regresar de lleno a nuestra niñez con el primer teaser tráiler de 'Toy Story 4'. Lo consiguió a medias, pues si bien es cierto que la generación 'Toy Story', la que ha crecido junto a Woody, Buzz y compañía, es un público fiel a sus juguetes favoritos y que se emociona con cada nuevo relato en el que aparezcan, una gran mayoría consideró que esta preciosa etapa se había cerrado cuando Andy decidió hacer lo propio en 2010 en 'Toy Story 3'.
Para muchos, la madurez que mostró el dueño de los juguetes hace ya ocho años coincidía con la suya propia por aquel entonces, ese doloroso adiós a la niñez que nos obliga a despedirnos de lo que tan buenos momentos nos brindó.
Ya hemos dejado claro lo mucho que significa 'Toy Story' para los millennials. Por esa misma razón, la cuarta parte cuenta con una presión añadida. ¿Cómo convencernos de que alargar la gallina de los huevos de oro de Pixar es una buena idea? Para qué os voy a engañar, yo tengo miedo, o más bien pánico, a sufrir una decepción con esta cinta. El nuevo personaje, Forky, que aparece ya en el teaser rompiendo la armonía entre los juguetes, tampoco termina de enganchar de primeras, aunque conociendo su historia el interés aumenta considerablemente. Es una película que nos hace sentir como Marge en Brasil, con una mezcla de éxtasis y preocupación a partes iguales.
Merendar puro hype con 'Pokémon: Detective Pikachu'
El lunes de amargura había evolucionado a un lunes de nostalgia, escepticismo e ilusión gracias a 'Toy Story 4'. Pero la segunda evolución, y nunca mejor dicho, sería todavía mejor. A media tarde, un Pikachu con voz de Ryan Reinolds nos sorprendía gratamente en el estreno del trailer de 'Pokémon: Detective Pikachu', basado en el videojuego de 2016 que lleva el mismo nombre.
Lo más visto
Seamos sinceros: ¿quién esperaba algo decente de esta película? Aunque no sería la primera vez que un trailer prometedor desemboca en una película decepcionante, es imposible no tener el hype por las nubes tras ver el primer clip. De hecho, ha generado tanta expectación que ha arrasado en repercusión a 'Toy Story 4' tal y como el tipo agua lo hace con el fuego en el juego.
Muchos se quedan en la superficie, en la polémica sobre si Pikachu está raro con ese pelaje o si Jiggypluff da más o menos miedo. Pero aquí lo único importante, a la espera del resultado final, es que por fin los fans que tenemos ya unos añitos podamos disfrutar de algo relacionado con Pokémon. Os hablo a vosotros, los denominados nostalfags, aquellos que se niegan a aceptar que haya más generaciones que la primera, o si me apuras la segunda. Aquellos para los que su mundo es Kanto, para los que elegir entre Charmander, Squirtle o Bulbasaur fue la decisión más difícil que tuvieron que tomar en su niñez, para los que se tiraron meses manejando los glitches de 'Rojo', 'Azul' y 'Amarillo' a su antojo en busca de un Mew que nunca estuvo en ese maldito camión.
Sois vosotros, somos nosotros, los que 20 años después seguimos recordando con cariño esa etapa de nuestra vida en la que gastamos decenas y decenas de pilas como si no hubiera un mañana para ganar al Alto Mando en la Game Boy Color, a quienes más ilusión ha hecho este tráiler, porque puede que de una vez por todas seamos recompensados con una trama relacionada con la saga de videojuegos acorde a nuestra edad actual. El temor a que el humor sea demasiado similar al de la película 'Ted', pero cambiando a un peluche por Pikachu y a Mark Wahlberg por un adolescente, está ahí, pero vale la pena arriesgarse e ilusionarse. Tras tantos años reclamando que Pokémon sea menos tipo Chansey y más tipo Gengar, a estas alturas de la vida ya nos vale hasta un Drowzee. Pero que nos lo den, por favor.
Pasar un mal trago en la cena con la muerte de Stan Lee
Nuestra infancia se basó en 'Toy Story' en el cine o en la cinta VHS y en Pokémon en la Game Boy. En nuestra adolescencia nos fuimos inclinando hacia los cómics y películas de superhéroes, y es ahí donde ese lunes 12 de noviembre nos dio una estocada que echó al traste cualquier tipo de sentimiento positivo con la muerte de Stan Lee.
El hombre clave en la expansión de Marvel gracias a sus creaciones (Spider-Man, Iron Man, Hulk, Thor y un largo etcétera de personajes) encontró en el Universo Cinematográfico Marvel la forma de conectar con el público joven, que ha caído rendido ante el poder y el carisma de Los Vengadores. Su fallecimiento deja un vacío importante entre esos seguidores, acostumbrados a buscarle y encontrarle en cameos de Marvel cada pocos meses.
Poco importa la leyenda negra que siempre ha acompañado con respecto a la verdadera autoría de los cómics originales, Lee supo granjearse el apoyo y popularidad necesarios, también entre los jóvenes, para que su figura fuera indestructible. Y lo será igualmente tras su muerte, que convirtió ese lunes tan prometedor en un lunes aciago, o al menos agridulce. Es lo que pasa por confiar en el primer día de la semana. Otra lección de vida para los millennials.