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¿Aburrirte en Selectividad? Siguiendo estos consejos, seguro que no
Por mucho que agobien al principio, las pruebas de acceso a la Universidad son muy fáciles. Si los políticos no quieren complicarlo, tocará buscar a los estudiantes la forma de que la selectividad vuelva a ser un reto.
04 Junio 2019
|Todos sabemos que los exámenes que realizan cada año miles de jóvenes españoles para saber qué carrera podrán cursar es realmente fácil. La PAU, EVAU, EBAU, o como se quiera llamar ahora, ya no es lo que era. Todo el mundo llega siempre a la nota que quiere y se arrepiente de haber estudiado tanto para lo que luego es la prueba. Bueno, eso unos. Para otros, estudiar se ha convertido en subir cientos de miles de fotos a las historias de Instagram en las que aparecen numerosos apuntes subrayados en colores diversos. No nos engañáis, no habéis leído ni dos páginas.
Por eso, nos gustaría aportar unas cuantas ideas para que el examen no sea tan sencillo, y echarle pimienta a tan aburrido trámite.
Antes del examen
- En primer lugar, escoge una carrera que exija una puntuación desorbitada. Aunque no te guste. Si baja del 13 no merece la pena ni el esfuerzo de sentarte a estudiar. Vas a ser un inútil así que vete a casa y ve buscando ofertas de empleo entre los comercios locales.
- Hablando de estudiar, estudia poco. Llegar a un examen sabiéndote todo el temario denota inseguridad en tu capacidad de inventiva. Con lo que hayas oído en clase y un primer-último repaso en el transporte público camino del examen sobra para rellenar las caras que quieras.
- Si pese a la sencillez de la prueba, realmente quieres un puro 14 y decides pasar la noche estudiando, recomendamos tomar entre diez y doce latas de bebida energética, siempre dependiendo del peso, claro. Además, el café aporta la dosis de cafeína y temblores que tanto necesitas para aguantar una noche de mirar al papel sin entender nada. Eso sí, aunque hagas el examen a 15 km de casa, no necesitarás coche.
- Para los más fiesteros, se recomienda alterar el orden natural de las cosas. En lugar de salir del último examen y agarrar la botella de ginebra, puedes hacerlo a la inversa (siempre que tengas 18). Primero unos buenos chupitos, y luego, con la tranquilidad y la verborrea que aporta el alcohol, entras a por tu notaza. Se aconseja no vomitar sobre el examen, no suele agradar. Por el olor, más que nada. Dormirse sobre la mesa puede ser aconsejable si la situación es crítica. Fuera de bromas, me sé de alguno que ha aprobado así...
- Si lo que quieres es experimentar la ansiedad y la preocupación en su máximo grado, el consejo es el siguiente: sutilmente ve dejando el DNI en sitios extraños los días previos al examen. Detrás del váter, en el alféizar de la ventana, en el altillo. Si para el día del examen no te lo han quitado, con un poco de suerte, lo olvidarás y tendrás la presión mental de acordarte de cual fue el último sitio estúpido en el que dejaste el carné, ir a casa, cogerlo, y volver a la universidad antes de que se haya acabado el examen. Si eso no hace que tus pulsaciones suban un poco, eres un auténtico hombre de hielo.
Durante el examen
- Se aconseja entrar en la clase corriendo y saltar sobre las mesas de tus compañeros, y sobre ellos si hace falta, para llegar lo antes posible a tu asiento. No porque tengas prisa, nada más lejos de la realidad, pero una buena entrada debe ser apoteósica. Un potente eructo en el mismo momento en que todos estén empezando a estar en silencio también puede crear un efecto parecido
- Sacar el móvil no está permitido, pero la partidita de Candy Crush es sagrada, y los profesores lo saben. Si lo hizo Celia Villalobos en el Congreso, cómo no lo vas a poder hacer tú.
- No lleves bolígrafo. No es un artículo caro, seguro que encuentras algún alma caritativa que te deja un boli mejor que tu carcomido Bic azul que utilizas desde que aprendiste a escribir.
- Siempre y en todo lugar deberás poner referencias a tus series favoritas en el transcurso del examen. Por supuesto, pensando en hacerle la vida más entretenida al profesor que le toque corregir. Es mejor contar una temporada de 'Juego de Tronos' bien explicada, que el aburridísimo reinado de Felipe III. Frases de 'Los Simpson', 'Aquí no hay quien viva' o 'La vida moderna' siempre son de agradecer por parte de un profesorado demasiado acostumbrado a la monotonía de muchos exámenes.
- Copiar en teoría tampoco se encuentra entre las conductas más adecuadas para un examen. Pero, en teoría, funciona hasta el comunismo, en teoría. (referencia a 'Los Simpson', no le busquen connotación política, que no la tiene). Por lo que un vistazo rápido al examen del compañero nunca está demás. Asegurarse de que la persona de la que copias no es más zopenco que tú mismo es un imprescindible para no salir escaldado.
Al acabar el examen
- En el momento de entregar el examen, lo suyo es dedicarle unas palabras al profesor que se encarga de la vigilancia del mismo. Siempre en los extremos, o tirarle los tejos, o insultarle. En el término medio solo se quedan los cobardes.
- Al salir, en muchas ocasiones se hacen hogueras en las que se queman los apuntes del curso. Quémalos incluso si has suspendido. Ya tienes una excusa más que válida para pedirle unos apuntes decentes a alguien mucho más competente. Porque con los tuyos no habrías aprobado ni a la quinta convocatoria. Y en el fondo lo sabes.
- Nunca pierdas la esperanza. Sacar un 1,2 puede convertirse en un 12 si el que lo escribe es más torpe que tú. Los milagros existen y, aunque lo más probable es que no te pasen a ti, nunca se sabe.
- Acuérdate de que son varios exámenes, si solo has hecho el primero, no te vayas a casa. Parece una obviedad, pero...
Si sigues todos y cada uno de nuestros consejos y aun así consigues aprobar, e incluso llegar a la nota que buscabas, eres un auténtico fuera de serie y promulgaremos una petición en change.org para que te nombren presidente del gobierno. En cualquier caso, mucha suerte para los exámenes y a disfrutar de unas más que merecidas vacaciones.
Aunque si de verdad necesitáis motivación y el humor no es suficiente, aquí tenéis un mensaje del míster Ibai, el mejor entrenador para estos momentos difíciles.