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PsiCall: cuando la atención psicológica también es necesaria en la universidad
La Universidad Complutense de Madrid lanzó en junio de 2017 el servicio PsiCall UCM con el objetivo de atender psicológicamente a sus estudiantes. Hablamos con Francisco José Estupiña, coordinador de este servicio, sobre los motivos de su lanzamiento y los principales problemas del alumnado.
| 18 Febrero 2019
La psicología es una parte fundamental del ser humano. Los problemas de salud mental forman parte de nuestra vida, y nos acompañan a diario desde nuestra poca recordada y feliz infancia. Son ya muchos los adolescentes que visitan al psicólogo para hablar de sus preocupaciones, de sus cosas, de aquello que no les deja ser felices. Pueden tratar temas tan diversos como la pubertad, la difícil convivencia con sus padres o ese primer amor que, dicen, nunca se olvida. Estas inquietudes continúan en la universidad.
Miles de estudiantes acuden con ilusión a las aulas deseosos de aprender camino a un futuro incierto. Pero lo que esperan no siempre es lo que ocurre. La esperanza de saber que están estudiando lo que le gusta se diluye, a veces, en cuestión de meses. Además, se enfrentan a los exámenes, a los trabajos (mejor individuales que en grupo, gracias) y a esa difícil convivencia con la ansiedad o la depresión a pesar de su temprana edad. Para combatir estos problemas que afectan a los alumnos, la Universidad Complutense de Madrid (UCM) ha puesto en marcha la iniciativa de PsiCall UCM.
Este servicio de atención psicológica está dirigido a cubrir las necesidades psicosociales del alumnado de la universidad más grande de España. Nació a lo largo de 2016 como una iniciativa conjunta del Vicerrectorado de Estudiantes y la Clínica Universitaria de Psicología (CUP). Después de varios meses de preparación, PsiCall comenzó a prestar sus servicios a los alumnos en junio de 2017. Pero, ¿qué motivos han llevado a esta universidad a crear este innovador servicio?
"PsiCall surge porque, tanto desde el Vicerrectorado como desde la CUP, se constatan las dificultades que tienen los estudiantes de la UCM para solicitar y recibir atención por problemas psicosociales, que son especialmente prevalentes en la etapa universitaria" cuenta Francisco José Estupiña, coordinador del programa. Este servicio, prosigue, "es gestionado y coordinado por profesionales con una amplia trayectoria profesional tanto en docencia e investigación como en la práctica clínica".
Mayor actividad durante el período de exámenes
La Complutense fue la primera universidad española en poner en marcha este servicio, y en la actualidad es la única que dispone de él. Desde su puesta en marcha en junio de 2017, PsiCall ha atendido a más de 800 estudiantes y su actividad ha aumentado de forma exponencial, doblando su cifra de 2017 a 2018. Los estudiantes disponen de dos vías de contacto: a través del correo electrónico en psicall@ucm.es o por teléfono en el 913945200. El horario, amplio, es de lunes a domingo de 7:30 a 23:30 horas.
Para complementar estas dos vías, PsiCall lanzó hace varios meses la tercera, PsiChat, un servicio de mensajería instantánea por donde los estudiantes pueden contactar con los psicólogos de la plataforma. Los estudiantes deben descargar la aplicación PsiChat desde Google Play o AppStore, e iniciar sesión con su cuenta de la UCM. Como explican en su web, esta forma de contacto reúne las ventajas de los dos formatos anteriores: la inmediatez de la llamada y el formato escrito del correo electrónico.
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La actividad de PsiCall varía cada semana, pero Estupiña encuentra una relación entre el período de exámenes y el aumento de las llamadas. "Los alumnos suelen tener una ansiedad más elevada y, por tanto, demandan más este servicio", explica. El horario en el que más se ponen en contacto con ellos es, como quien dice, al salir de clase: entre las 13:00 y las 14:00 horas y entre las 20:00 y las 21:00 horas. Por último, Estupiña espera que más alumnos se animen a contactar con ellos en el futuro.
Los problemas de los estudiantes
El principal problema psicológico por el que contactan los estudiantes con el servicio de PsiCall es por la ansiedad y sus distintas tipologías. Por detrás, aparecen el bajo estado de ánimo y los problemas académicos. Por otro lado, desarrolla Estupiña, "cuando nos contactan por motivos académicos los principales problemas asociados son, en un 78%, la ansiedad; en un 16% el bajo estado de ánimo; en un 3% las adicciones a sustancias y los abusos sexuales". En conclusión, la mayor parte de los estudiantes se ponen en contacto con PsiCall "por la falta de estrategias para manejar la ansiedad, no sólo en la época de exámenes, aunque en esta sea más acentuada", finaliza.
Luchar juntos contra el suicidio
El suicidio es un tema tabú en los medios de comunicación por miedo al efecto contagio. Desde hace décadas y por recomendación de los psicólogos, los periodistas no informan del suicidio porque creen que provocaría más muertes. Como apenas se habla de ello, parece que el problema no existe. Sin embargo, en España se suicidan cada año entre 3.500 y 4.000 personas, el doble de los fallecidos en accidentes de tráfico. Además, es la segunda causa de muerte en personas que tienen entre 15 y 29 años. Casi nada.
La postura de Estupiña es clara: los medios deben romper con ese tabú. "Consideramos que los medios de comunicación pueden tener un efecto preventivo si se trata el tema desde una perspectiva de aceptación y apoyo", explica. Y continúa en esta misma línea. "Tratarlo como un problema que puede tener solución con una adecuada intervención quizá resulte verdaderamente constructivo". En la actualidad, cerca de un millón de personas se suicidan cada año en todo el mundo. Las cifras son más que alarmantes.
La prevención es fundamental, ya que una buena estrategia podría reducir sobremanera este espinoso problema del que parte de la sociedad no es consciente. "Sigue siendo muy necesario detectar a tiempo casos que se pueden prevenir", declara el coordinador de PsiCall. Para alcanzar este objetivo, tienen que "trabajar todos en la misma dirección, con los medios de comunicación como aliados", aclara. A diferencia de las habituales campañas publicitarias para concienciar a la sociedad de los accidentes de tráfico o la violencia machista, no existen campañas para detener esta grave epidemia.
En conclusión, toda la sociedad debe trabajar conjuntamente para poner freno al suicidio y realizar una estrategia de prevención más que necesaria. En julio de 2018 el Gobierno anunció que estaba trabajando en un Plan Integral de prevención del suicidio y de manejo de la conducta suicida. La estrategia estará basada en dos pilares fundamentales: la publicidad, ahora inexistente, y la detección precoz para la prevención. El paso del tiempo determinará si este remedio es el adecuado.