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Sus hazañas, sus polémicas, su accidente... Niki Lauda fue tan importante en la pista como fuera de ella
Niki Lauda, uno de los pilotos más laureados de la historia de la Fórmula 1, fallece junto a su familia, pero su recuerdo dentro y fuera de la pista permanece.
21 Mayo 2019
|Ha sido su familia la encargada de comunicar públicamente la pérdida de una de las personalidades más recordadas de la Fórmula 1: "Con una profunda tristeza, anunciamos que nuestro querido Niki ha fallecido en paz con su familia este lunes", remarcando también en el comunicado sus valores como piloto, pero también como marido, padre y abuelo. Porque Niki Lauda no fue solo uno de los pilotos más importantes de la historia, fue un ejemplo de superación.
Niki Lauda nació en la capital austriaca, Viena, en el año 1949, en el seno de una familia de clase alta. Sin embargo, y pese a haber podido llevar una vida más tranquila como empresario, su objetivo fue siempre ser el mejor en el mundo del motor. Su familia se opuso a ello, pero no tardaría en demostrar sus capacidades al volante.
Estamos en aquella época en que ser piloto de Fórmula 1 era verdaderamente una profesión de riesgo. Varios de los compañeros que cruzaron la línea de meta junto al austriaco perecieron en el intento. Las cifras de fallecidos en los circuitos aumentaban cada año, y las medidas de seguridad, aunque siempre creciendo todavía no eran de confianza para salvar las vidas en según qué incidencias. Por lo tanto el temor de la familia era comprensible, y la tenacidad y la osadía de Niki asombrosas, como posteriormente demostraría en muchas ocasiones a lo largo de su carrera.
Sus comienzos como piloto
En el año 1971, a los 22 años, debutó en el circuito de su país, de la mano de March, aunque durante ese año se encontraba disputando una categoría inferior y solo arrancó esa carrera. Su primera temporada completa fue complicada, pues no consiguió puntuar y se vio obligado a cambiar de equipo. En British Racing Motors consiguió los primeros puntos de su carrera en el desaparecido circuito de Zolder, y pese a los muchos abandonos, pudo demostrar el talento suficiente para ser fichado por Ferrari.
Los mejores años de su carrera, truncados por un hecho que le cambiaría la vida
Los años 1975, 1976 y 1977 fueron los más exitosos en la trayectoria de Niki Lauda. Aunque su primera victoria llegó en España un año antes, no sería hasta 1975 cuando empezaría a forjar su leyenda. Ganó 5 carreras (entonces se disputaban 14, y los problemas mecánicos eran muy habituales) y la diferencia con respecto al segundo en discordia, Emerson Fittipaldi, también campeón del mundo fue muy amplia.
En 1976 se tuvo que conformar con el subcampeonato debido al accidente que marcó su carrera. El viejo Nürburgring, circuito de 22 kilómetros y 7 minutos por vuelta, acogió en su última edición el brutal choque de Niki Lauda, en el que el incendio de su monoplaza le produjo quemaduras de primer y tercer grado, que serían visibles el resto de su vida. No se volvió a rodar en Nürburgring hasta su remodelación y acortamiento en 1985. Después de unas imágenes estremecedoras, de que sus propios compañeros que le ayudaron a sacarle del vehículo le dieran por muerto y de pasar cuatro angustiosos días en coma, el piloto se recuperó, y solo se perdió dos Grandes Premios hasta su acelerada vuelta al asfalto. Su rival en el campeonato, Hunt, se había acercado aprovechando su ausencia, pero no sería hasta la última carrera cuando le arrebataría el primer puesto, debido a que las condiciones meteorológicas de Fuji hicieron a Lauda recobrar la sensatez y abandonar para no sufrir más percances.
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Niki Lauda era consciente de que tendría otras opciones de ganar, y así sucedió en 1977, también con la 'Scuderia Ferrari' y en 1984, en McLaren, con una nómina de pilotos rivales muy diferente a la que había vencido siete años antes. Alain Prost, al que superó por únicamente medio punto, Nelson Piquet, Keke Rosberg, Ayrton Senna o Nigel Mansell, todos ellos campeones del mundo.
Retirada gloriosa
El adiós al 'Gran Circo' llegaría en 1985, a los 36 años de edad tras una última victoria en Holanda, en una temporada en la que su McLaren sufrió 11 abandonos en las 14 carreras que disputó. Sus números fueron de auténtico líder con 25 victorias y 54 podios, aunque siempre quedó en el tintero el hecho de que podía haber sido tetracampeón, o quién sabe si más, de no ser por el accidente de Nürburgring.
Tras su retirada siguió vinculado al mundo de la velocidad, en compañías aeronáuticas así como formando parte de varios equipos de Fórmula 1, como Mercedes, en los últimos años de su vida. Incluso su rivalidad con James Hunt fue homenajeada mediante el rodaje de la película 'Rush', estrenada en el año 2013.
Siempre ligado a la F1
Su impecable trayectoria deportiva le convirtió tras su retirada en una voz autorizada en el 'paddock', y el austriaco no se guardaba nada. En más de una ocasión, criticó duramente ciertas decisiones y actitudes de Fernando Alonso, aunque siempre reconoció su enorme talento como piloto.
La salud del Niki Lauda lleva años siendo delicada, habiéndose sometido a dos trasplantes de riñón, el primero en 1997, donado por su hermano y el segundo en 2005, por su pareja. Hace seis meses se le tuvo que trasplantar de urgencia un pulmón, aunque la medicación para la enfermedad afectaba a sus ya mermados riñones. Su fallecimiento es una enorme pérdida para la competición de motor más importante del mundo. Lauda siguió las carreras incluso desde el hospital, recibiendo los tratamientos que le tuvieron postrado los últimos meses de 2018.
El Gran Premio de Mónaco será muy probablemente el elegido para los actos principales en recuerdo del piloto, aunque probablemente reserven alguno para el fin de semana del 28 al 30 de junio, cuando se disputa la carrera en su país natal, Austria. Gracias por tanto, leyenda.