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Muchas risas con el meme del abuelo Simpson, pero, ¿nos hemos convertido ya en el bueno de Abe?
El meme de Abe Simpson hablando de situaciones antiguas se ha hecho viral. Pero espera, ¿cómo que antiguas, si yo dejé de usar eMule hace nada? ¿Tan rápido avanza todo como para ser considerado ya un octogenario por haber vivido esa época? Parece que sí.
| 23 Mayo 2019
El abuelo Simpson es el gran protagonista del nuevo meme viral de Twitter. La imagen corresponde al capítulo 24 de la sexta temporada de 'Los Simpson', 'El limonero de Troya', uno de los episodios más míticos de la serie. En él, Abe Simpson cuenta la historia del famoso limonero de Springfield, motivo de enfrentamiento entre el pueblo de la familia Simpson y Shelbyville.
Pero el meme no está hecho para hablar de limones, sino como excusa para contar en Twitter historias y sucesos antiguos que seguramente los niños y adolescentes de ahora desconozcan. ¿Cuál es el (terrorífico) problema? Que estas historias y sucesos nosotros los hemos vivido. ¿La última generación de millennials se ha convertido ya el abuelo Simpson?
Por lo que parece, sí. Solo hay que ver los dos temas principales que han copado más memes de este estilo: eMule y Ares y el Messenger. Uno entra ilusionado a ver unos memes de un anciano creyendo que iban a hablar de momentos de nuestras generaciones anteriores, y se encuentra con que ya no es Bart Simpson, sino Abe. Y el golpe es difícil de afrontar, para qué nos vamos a engañar.
"Entonces cuando quería ver una película tenias que iniciar el Emule y esperar 8 horas hasta que la tuvieras..." pic.twitter.com/Bfav1znS5R
— Kike ???????? (@Kik3Higuera) 22 de mayo de 2019
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Continuación:
— Patricia (@laparrapa) 22 de mayo de 2019
Como no teníamos Wikipedia, probabábamos suerte a que estuviese en la Encarta. pic.twitter.com/KYRK3TJdYG
Y entonces cuando tardaba en responder enviábamos un zumbido pic.twitter.com/Puw0NNCpo0
— nebula ✨ (@Irene_Soldier) 17 de mayo de 2019
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Y cuando la persona que te gustaba se conectaba al Messenger tú te desconectabas y te volvías a conectar para que le llegase la notificación de que estabas online y te hablase. pic.twitter.com/2reLLiVvrB
— Bukki (@Ostraigohamor) 22 de mayo de 2019
Porque lo que en Twitter se considera ya propio del padre de Homer nosotros lo recordamos como si fuera ayer. Todavía nos acordamos del pique eMule-Ares (os habla un fan del primero) y de los problemas en forma de peli porno inesperada que nos ocasionaban ambos, de lo difícil que era ver una serie o película online (imposible olvidarse de los míticos 72 minutos de límite de Megavideo), o de lo ridículo que era hacer zumbidos en Messenger para hacerse notar (por qué no hubo nadie que nos dijera que, si no nos había contestado, era porque no le interesábamos). Incluso a veces se nos viene a la mente aquel mundo sin Wikipedia y con una Encarta a la que podíamos trolear. Pues bien, todo eso que pensamos que pasó hace nada, ya es tan antiguo como la historia del limonero.
Lo cual nos lleva a una reflexión. Estamos viviendo el cambio más acelerado de toda la historia de la humanidad, y apenas somos conscientes de ello. ¿Cómo es posible que con 20-30 años ya seamos Abe Simpson? ¿En qué momento de una década a otra las cosas también tanto que parezcamos de mundos distintos?
Porque tú pregúntale a un chico que esté en la ESO que qué es el eMule, la Encarta o cómo funcionaba Messenger, a ver si tiene siquiera una remota idea. Ya nos hemos convertido en esa generación a la que los más jóvenes nos pueden decir: "¿Y cómo podíais vivir así?". Si llega ese duro momento, asume el mazazo de la mejor manera posible y afronta la realidad con una sonrisa nostálgica. Efectivamente, todos nos preguntamos, y más viendo el avance de las tecnologías en la actualidad, cómo podíamos aguantar todas esas trabas que había, o por qué nos preocupaba tanto el color o el estilo de letra que teníamos en Messenger, o por qué nos emocionábamos al recibir un mensaje privado en Tuenti. Pero qué queréis que os diga, gracias a vivir esas situaciones tan cómicas en el pasado podemos sentirnos tan identificados con el meme, y yo he podido escribir este artículo. Así que sí, cuanto antes asumamos que ya somos Abe Simpson, mucho mejor. Y a otra cosa.