Heliesquí, o cómo alquilar un helicóptero que te lleve fuera de pista a esquiar en lugares únicos
Si tienes dominadas hasta las pistas negras de las estaciones de esquí, quizás deberías probar el heliesquí: sin reglas ni límites, solo un helicóptero y una cima esperando ser descendida.
22 Diciembre 2021
|Para muchos deportistas la llegada del invierno supone un infierno, porque el frío y la lluvia les dificulta salir a la calle a correr todo lo que les gustaría, jugar al fútbol a pleno rendimiento y un largo etcétera de actividades que realizan al aire libre.
Sin embargo, hay otro gran grupo que está deseando la llegada del frío para quitarle el polvo a los esquís y llenarlos de nieve en su lugar. Ya lo hemos comentado todo sobre el esquí: las dudas más comunes, consejos básicos para esquiadores novatos, los músculos que se ejercitan con su práctica... Pero si tenéis todo aprendido, e incluso las estaciones más difíciles os las estáis pasando con la gorra, quizás deberías probar otra modalidad tan desconocida como excitante, que te permitirá volver a enamorarte del esquí y de los paisajes que rodean a este deporte: el heliesquí.
Heliesquí: un descenso en helicóptero sobre nieve
El heliesquí es una modalidad en la que se esquía sobre cumbres de nieve virgen, sin las restricciones que tiene una pista, y a las que solo se puede acceder mediante un helicóptero. Transportar a los esquiadores por el aire es el único modo de llegar a las cumbres tan altas e inhóspitas donde se practica este deporte.
Tiene la gran ventaja de ser la única manera posible de acceder a sitios inmejorables que de otro modo no se podría, y además hacerlo en poco tiempo.
Aunque parezca algo novedoso, el heliesquí se lleva practicando desde más de 50 años. Canadá es quien se atribuye el mérito, aunque otros países como EEUU y Gran Bretaña aseguran ser los inventores. Lo más probable es que se desarrollara paralelamente en varios lugares, como la mayor parte de los descubrimientos.
Lo más visto
En lo que sí gana Canadá es en poseer la mayor galería de heliesquí, todo un paraíso en el que sus montañas han conseguido meterse en su bolsillo el 90% del mercado de esta modalidad. En Europa también se puede practicar el heliesquí, siendo Suiza la mayor potencia. En Francia y Alemania está prohibido, mientras que en España se puede disfrutar en distintos puntos de la Península, como en Baqueira Beret, situado en el Pirineo catalán.
Europa y Norteamérica tienen dos modelos diferentes de heliesquí:
En el modelo europeo el helicóptero funciona como un taxi, es decir, lo único a lo que se dedica es simplemente dejar a los esquiadores en la cima en unos puntos determinados que normalmente se definen con anterioridad de la manera más cómoda y segura posible. Al terminar, los propios esquiadores deben regresar a la base por sí solos, lo que requiere un plus de habilidad esquiando.
En el modelo canadiense se toma como referencia una zona base en mitad de la montaña. Desde ahí se sube a los esquiadores a distintos picos del área escogida. Cuando han finalizado los descensos de esa zona, se cambia la zona base a otra parte, donde se repite el proceso. Así sucesivamente. Por ello, en este modelo el papel del helicóptero tiene más peso, se encarga tanto de trasladarles hasta la base como de volver a ella.
¿Qué se necesita para hacer heliesquí?
Lo primero que hay que saber es que es necesario ir con un guía experto en esta modalidad. Incluso que sean expertos en cada zona en la que se pueda practicar. En cuanto al material técnico, lo más normal es pensar que el equipo es el mismo que para hacer esquí en pista. Sin embargo no es así, los esquíes de heliesquí son más anchos que los de esquí. La superficie de los esquís debe ser más ancha para tener más flotabilidad sobre la nieve sin tratar. Por supuesto, los bastones deben acompañar a los esquís.
Lo más nuevo
En cuanto a la ropa, no hay nada especial, simplemente que sea específica de esquí, que abrigue y que no se cale. Las gafas son muy importantes, a lo que tiene que acompañar un protector solar con factor alto, lo ideal es de factor 50.
Por los numerosos peligros que puede haber de aludes, desprendimientos o fenómenos naturales similares (recordemos que estamos en una zona prácticamente virgen), se recomienda llevar algunos objetos de seguridad como el ARVA. Se trata de un transmisor y receptor con el podemos tanto ser localizados como localizar a otros.
No está de más llevar siempre unas palas por si son necesarias, un teléfono móvil en mano para poder comunicarse y una mochila con sistema ABS airbag por si se produce una avalancha.
Falsos mitos sobre el heliesquí
Al igual que sucede con todas las prácticas deportivas, el heliesquí también tiene falsas creencias extendidas en la sociedad que no son ciertas.
La más habitual es la que dice que el heliesquí es peligroso. De primeras no es un disparate pensarlo leyendo la explicación, y desde luego es más complicado que una pista de esquí de color verde. No obstante, el heliesquí no es soltarte en lo alto de una montaña y jugarte la vida: tiene su preparación, y vas siempre acompañado de un guía experto que te acompaña en los descensos.
Una de las falsas indicaciones que se comentan es que los esquiadores deben saltar del helicóptero con los esquís puestos, y no solo no es verdad sino que también es peligroso. El helicóptero te lleva a la zona desde la que vas a descender, que es la cima, pero no es como un telesilla en el que te bajas y empiezas a esquiar directamente.
Por supuesto, no hace falta ser esquiador profesional para practicarlo, hay zonas especializadas para los esquiadores más experimentados pero también hay niveles bajos o medios para la gente que se está iniciando en la práctica. Y tampoco es tan caro como dicen. En España se puede encontrar a un precio que no es imposible de pagar.