Recreativo de Huelva
Recreativo, Córdoba o Gimnástica Segoviana comparten una cruda experiencia: la tóxica relación entre el fútbol y las SAD
Las Sociedades Anónimas Deportivas llegaron al fútbol español en la década de los noventa. Conocemos la historia de tres clubes que han pasado por momentos muy difíciles desde entonces, y cómo sus aficionados han tratado de evitar que el club de su vida desapareciera en manos de personas poco aptas para llevar las riendas.
| 10 Octubre 2019
El fútbol no es tan bonito como lo pintan. Ahora está de moda hablar de cifras, aquellas que obligan al disparate y a la insensatez. Los que pueden y quieren pagan más de 100 millones por los servicios de un jugador a veces no tan contrastado como cabría esperar. Una persona tratada como un juguete obligada a rendir incluso antes de pisar el césped. Pero, más allá de números, en el fútbol no todo es lujo. En el fútbol no todo es riqueza. En las catacumbas del deporte rey, en el fútbol modesto, se vive al límite cada año.
En este reportaje vamos a conocer las telarañas de un fútbol muchas veces olvidado y que lucha cada semana por sobrevivir. Equipos que han pasado por graves problemas y que han estado a punto de desaparecer. Apoyados por sus aficionados, los más fieles en los momentos más delicados, han podido salir adelante. Todo para evitar acabar con un sentimiento transmitido de generación en generación. Todo para que tu equipo siga siendo una realidad en vez de un recuerdo. Toca hablar de las Sociedades Anónimas Deportivas, de asociaciones de aficionados, de procesos complicados. No os entretengo más. Arrancamos.
FASFE, una década en contra de las SAD
La Federación de Accionistas y Socios del Fútbol Español (FASFE) está compuesta por una red de asociaciones de aficionados, pequeños accionistas y clubes democráticos que trabajan por un fútbol transparente y sostenible. Creada en el año 2008, su objetivo es ayudar a aquellos aficionados que deseen jugar un papel protagonista y responsable en la vida del club de fútbol del que son seguidores. Desde sus inicios, FASFE ha estado en contra de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD), que llegaron al fútbol español en la década de los noventa.
"La Ley del Deporte impuso como obligación para los clubes de categorías profesionales (es decir, la Primera y la Segunda División) la adopción de la forma jurídica de Sociedad Anónima Deportiva", nos explica Emilio Abejón, secretario de FASFE. Esta Ley fue aprobada en octubre de 1990 y entró en vigor el 30 de junio de 1992. Desde entonces, prosigue Abejón, "los clubes que acceden a estas categorías desde el fútbol no profesional son obligados a transformarse en SAD". Por poner varios ejemplos recientes, clubes como el Lugo o el Llagostera fueron obligados a convertirse en SAD tras ascender a Segunda División.
Pero hubo cuatro clubes que se libraron de esta imposición al tener un saldo patrimonial positivo en los cinco años anteriores (1985-1990): Athletic de Bilbao, Barcelona, Real Madrid y Osasuna. Sin embargo, como comenta Abejón, no existe una medida similar para los clubes que ahora ascienden de Segunda División B a Segunda División. Pueden tener un saldo patrimonial positivo, pero al ascender son obligados a transformarse en SAD. Pero, volviendo al pasado, ¿por qué los clubes fueron obligados a realizar esta conversión en los años noventa?
"Fundamentalmente fueron razones de índole económica", aclara Abejón. "El legislador pensó que sustituyendo a la masa social por inversores, la gestión sería más prudente y no se incurriría en las pérdidas de aquella época", continúa. Sin embargo, el tiempo ha demostrado el patinazo de esta idea. "Durante años, las SAD han generado pérdidas mucho mayores que las de los mismos clubes antes de convertirse", apunta el secretario de FASFE. Estas enormes deudas comenzaron a reducirse cuando LaLiga implantó un sistema de control económico en el año 2012.
Lo más visto
A pesar de todo, esta obligación podría llegar a su fin en un futuro no muy lejano. Según relata Abejón, existe un consenso político en este sentido. "El anteproyecto de la nueva Ley del Deporte elimina la obligación de estar constituido como SAD en las categorías profesionales del fútbol", comenta al respecto. Preguntado por la posibilidad de que los clubes dejen de ser SAD con la aprobación de la nueva Ley, Abejón cree que solo sería posible "en casos de SAD al borde del colapso económico o cuando el accionariado esté muy repartido y no haya individuos o grupos mayoritarios de control".
Abejón reconoce que en los últimos años no han recibido el apoyo de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ni de LaLiga. Como curiosidad, FASFE sí que recibe apoyo de la UEFA. "Ellos entienden que para el fútbol es bueno que la afición esté organizada y defienda sus intereses en igualdad de condiciones que el resto de grupos implicados", cuenta. Aun así, la salida de Ángel María Villar y la llegada de Luis Rubiales a la presidencia de la RFEF pueden traer beneficios para FASFE. La Asamblea de la RFEF ha aprobado una modificación de los estatutos para que el presidente de FASFE pueda ser miembro neto de esta Asamblea. Si el Consejo Superior de Deportes (CSD) aprueba esta inclusión, los aficionados estarían representados por primera vez en la historia en la RFEF, algo que ya sucede desde hace décadas en Inglaterra.
Una de las funciones más importantes de FASFE pasa por asesorar a aficionados que quieren constituir una asociación para mejorar la situación de sus clubes. FASFE intenta guiar a estos colectivos en sus primeros pasos, para que los aficionados tengan un papel protagonista en las decisiones de su club. En la actualidad FASFE está formada por casi 30 asociaciones, donde están representados hinchas de equipos de todas las categorías del fútbol español. Es el momento de conocer en profundidad a algunos de ellos con un punto en común: su rechazo a las Sociedades Anónimas Deportivas.
El Recreativo de Huelva, un histórico al borde del abismo
Cuando pensamos en el Recreativo de Huelva solemos referirnos a él como el Decano del fútbol español. Fundado en 1889, fue la principal referencia para los miles de equipos que nacieron a partir de entonces. Con cinco temporadas en Primera División, el Recre se convirtió en Sociedad Anónima Deportiva al ascender a Segunda División en 1999. Ahí llegaron sus mejores años, con un regreso esporádico a Primera incluido, pero una década después comenzaron los problemas. Después del descenso a Segunda en 2009 el club, que era propiedad del Ayuntamiento, entró en concurso de acreedores.
Durante ese concurso se vende a Pablo Comas, que incumple los pagos a Hacienda y deja de pagar el convenio de acreedores. "Ahí el Recre entró en una crisis monumental, la más profunda de su historia", detalla por teléfono Narciso Rojas. Interesado desde la adolescencia por las SAD, Rojas es el expresidente del Recreativo Supporters Trust, que nació en 2014 para que sus aficionados pudieran influir en la gestión del club de un modo democrático.
Comas llegó a la presidencia con el equipo en Segunda y lo dejó en Segunda B con un embargo de Hacienda incluido. El Trust le puso una querella criminal por administración desleal. En riesgo por una posible desaparición, el Ayuntamiento expropió las acciones de Comas en junio de 2016. En aquella época, cuenta Rojas, los aficionados reunieron un millón de euros en menos de un mes "para salvar al club de un descenso a Tercera y de una posterior desaparición".
Lo más nuevo
El Decano ha pasado por varias situaciones límite desde entonces. Tras la expropiación, el Ayuntamiento buscó un comprador para el club. Ahí apareció Krypteia, que asesorada por Javier Jiménez quería hacerse con el control del Recre. El Trust, con la desconfianza propia de la experiencia, preguntó a otras aficiones si conocían a Jiménez. El Córdoba, que había sabido de Jiménez como asesor del presidente Carlos González, negó con la cabeza. "Nos dijeron que tuviéramos cuidado con Jiménez", apunta Rojas al teléfono. Con información de primera mano, el Ayuntamiento decidió que Krypteia no reunía las condiciones necesarias para comprar el club y rechazó su propuesta.
En la actualidad, el Recreativo de Huelva sigue siendo propiedad del Ayuntamiento, que todavía busca un comprador para el club. Preguntado por su futuro, Rojas responde con profundo optimismo. "Si seguimos en Segunda B y el club sigue a rajatabla el plan de saneamiento, podrá salir hacia delante", cuenta. Mejor sería soñar con un ascenso que aumentara los ingresos por televisión, pero Narciso prefiere poner los pies en el suelo y pensar en la continuidad del Recre en Segunda B. Además, en la próxima Junta de Accionistas se aprobará ampliar el poder de decisión de los aficionados.
Pasando a otro tema de actualidad, hablamos de la llegada del jeque Turki Al-Sheikh al Almería. Rojas, serio, deja clara su opinión nada más empezar. "No tengo la más mínima duda de que el Almería está abocado a la desaparición". La postura de FASFE sigue la misma línea, ya que creen que el club se ha convertido en "el juguete de un oligarca de un régimen antidemocrático enemigo de los derechos humanos". Relacionado con este caso, el Málaga vive ahora en una situación límite casi una década después de la llegada del jeque Al-Thani y de un periplo que les llevó a soñar con la Champions.
Para terminar, Rojas reclama una mayor atención de los medios de comunicación a este problema. Conocedor del tema, sabe que la amistad entre periodistas y propietarios perjudica la información que reciben los aficionados. "Parte del periodismo local intenta controlar a la masa, desaparecen clubes y no se entera nadie", razona. Ejemplos como la desaparición de la UD Salamanca o la del Logroñés o la cercana desaparición de otro histórico como el Xerez fundamentan su idea. Pero el Recre, como es el Decano, no puede morir. "Si el Recreativo de Huelva no fuera el club más antiguo de España ya habría desaparecido", concluye Rojas con sinceridad.
El Córdoba, un ejemplo de la mala gestión
Antonio Garcés es el cofundador de una asociación de accionistas minoritarios que fue creada hace siete años para proteger los intereses del Córdoba. La asociación, llamada Minoritarios CCF, tiene como objetivo velar por una adecuada gestión del club, para que sea transparente y sostenible. "El motivo de su creación fue la entrada del Córdoba en concurso de acreedores", reconoce Garcés. Mucho antes, en concreto en el lejano año 2000, el Córdoba fue obligado a convertirse en una SAD al ascender a Segunda División en la temporada 1998-1999.
"A raíz de este cambio el Córdoba pasó a ser dirigido por la persona con mayor capital en vez de por sus aficionados", explica Garcés. Desde entonces, el equipo andaluz ha vivido un vaivén de ascensos y descensos. Llegó, incluso, a disputar una temporada en Primera en la que acabó último con 20 puntos. "Fue increíble, pero creo que ahí empezó el declive del club". A la conversación se suma Eduardo José Sánchez, portavoz de CCF Somos Nosotros, una plataforma cordobesista formada por más de 1.000 aficionados del club andaluz.
En la temporada en Primera el presidente era Carlos González, que según Garcés venía "a llenarse los bolsillos", poniendo por el encima del éxito deportivo el beneficio personal. González provocó un cisma entre la afición y la directiva. "No quería al club, él buscaba un beneficio particular", apunta Garcés al teléfono. "Veíamos que el Córdoba se estaba deteriorando a nivel deportivo, vendiendo a sus mejores jugadores", insiste. Incluso, el Córdoba fue el primer club español en sacar dividendos, algo que se asemeja más a las empresas que forman el IBEX 35 y no a un equipo de fútbol. Acorralado por numerosos frentes, González dejó el club. Desde 2018 el presidente del Córdoba es Jesús León.
Con buenas palabras desde su llegada y con la promesa de un proyecto para volver a Primera, León empezó bien su camino como presidente. Sin embargo, no ha tardado en engañar a una afición ya cansada de mentiras. "Vimos en él un salvador, pero a la larga ha demostrado que es igual de malo que el anterior", razona Sánchez. León, como ya hizo González, ha buscado su propio beneficio e incluso ha provocado que la plantilla y empleados del club se queden varios meses sin cobrar. "Es un okupa en la presidencia, no está a la altura del club", concluye Garcés.
Ambos admiten que han temido la desaparición del club. Coinciden en la necesidad de la marcha del actual presidente para que la situación del Córdoba cambie. "Queremos hacer una oferta para que los aficionados puedan recuperar el control del club veinte años después", reconoce Garcés. Con el equipo en Segunda B, la situación del Córdoba requiere de una pronta solución para evitar males mayores. Todo con un objetivo común: que los próximos dirigentes miren al Córdoba desde el corazón y no pensando en ganar espacio en su bolsillo.
La Gimnástica Segoviana, un caso más de esta relación tóxica
Uno de los últimos clubes en padecer la alargada sombra de las Sociedades Anónimas Deportivas ha sido la Gimnástica Segoviana. "A un miembro de la Junta Directiva se le escapa en una entrevista en febrero que están en contactos con grupos inversores para intentar transformar el club en una SAD", cuenta Rodrigo Onrubia, uno de los creadores de la Plataforma 1928 en contra de la conversión. Sin novedad en los meses siguientes, Agustín Cuenca fue reelegido como presidente del club en el mes de junio de 2019.
Sin embargo, todo cambia en septiembre. El día 16 la Junta Directiva plantea a los socios la conversión del club en SAD con una propuesta de la multinacional Teknei. "La Junta amenaza con irse en caso de que salga 'no' a la SAD, lo que a muchos socios nos parece un claro chantaje", relata Onrubia. Es en ese momento cuando treinta socios crean la Plataforma 1928 en contra de la entrada de Teknei. Esta es una multinacional mexicana dedicada a las criptomonedas y que cuenta con Javier Jiménez como asesor, una persona que ya hemos conocido por sus malas prácticas en Córdoba y en Huelva.
????AVANCE???? La directiva presentará a los socios el día 4 de octubre una oferta de la multinacional española @ser_Teknei que traería consigo la transformación del club en Sociedad Anónima Deportiva. pic.twitter.com/me6VvJRYSQ
— Gimnástica Segoviana (@lagimnastica) September 16, 2019
Desde FASFE colaboraron enseguida con esta plataforma para evitar la conversión, que además de innecesaria tenía tintes peligrosos por los implicados. El 26 de septiembre, solo diez días después del primer anuncio, la Junta Directiva anuncia que abandonan la posibilidad de convertir al club en SAD. Ya en octubre, la Junta comunica que iba a dimitir al final de esta temporada, convirtiendo el futuro del club en una incógnita. Preguntado por el devenir de la institución, Onrubia afirma que "existe un grupo de socios que está recogiendo firmas para hacer un referéndum y convertir a la Gimnástica en SAD". Con todo, la Plataforma 1928 seguirá trabajando para que esta acción no se lleve a cabo y no ponga en peligro el futuro del club.
Como hemos comprobado, la ayuda entre las aficiones ha creado una red espontánea pero organizada entre aficionados. Esta red, tejida a golpe de la experiencia, ha evitado que varios clubes caigan en manos de propietarios con malas intenciones. El fútbol, que siempre será de sus aficionados, grita victoria con cada éxito de los que dejan su huella sentados en una butaca o animan sin gritos desde su sofá. Todo para evitar la desaparición de los recuerdos que han formado parte de tu vida desde la infancia.