El mundo es más gris que antes, y no por la polución: cada vez nos gustan menos los colores y más los tonos neutros
Un estudio señala que los objetos del día a día son cada vez de colores menos variados, y que el tono estrella ha pasado a ser el gris.
| 23 Febrero 2023
"El mundo está perdiendo color". Esta frase de primeras puede sonar chocante, o casi de trama principal de una película de Disney, pero tiene todo el sentido del mundo una vez escuchada la explicación. Y no, no es cosa de la polución que contamina el cielo (que también), sino que nuestros gustos ya no son tan coloridos como antaño, dando paso progresivamente a un tono grisáceo que quizás refleje en parte nuestra concepción actual de la vida.
El gris, el color más común de nuestro tiempo
El Science Museum Group Digital Lab ha realizado un estudio donde se analizan 7.000 fotografías de distintos objetos del Museo de Ciencia de Londres pertenecientes a 21 categorías distintas del ámbito cotidiano, desde cámaras y móviles hasta electrodomésticos. Para identificar los colores, se extrajeron los píxeles de cada fotografía y se pusieron en comparación, analizando también su forma y textura.
El color que más se ha encontrado en estas fotografías ha sido el gris carbón, que ha ido aumentado su uso en los objetos con el paso del tiempo. A excepción de un repunte de los colores saturados en los años 60, la tendencia a la homogeneidad y neutralidad es clara. Esta escalada grisácea está aparejada a una caída de colores como el amarillo y el marrón. Lo de este último puede estar ligado a un mayor uso de materiales plásticos frente a la madera que se usaba antes.
¿Las conclusiones? El mundo está perdiendo color. Por ejemplo, la ropa. Es irónico cómo nos hemos esforzado a lo largo de la historia para conseguir abaratar el precio de los pigmentos y que, ahora que tenemos una amplia gama de colores, decidimos vestirnos mayoritariamente de tonos sencillos como blanco, negro y gris.
Estos tres colores se usan como combinación básica para cualquier outfit. ¿Camisas estampadas? Sí, pero con unos pantalones negros. ¿Un jersey? Gris o blanco salvo que sea Navidad, por favor. ¿Toca ir de boda? Un traje negro no falla.
Nuestro hogar tampoco se libra de esta tendencia. Si comparases tu casa con la de tu abuela verías que no hay color, literalmente. Los hogares han pasado de tener llamativos papeles pintados y extravagantes azulejos a una tendencia minimalista y neutra.
Lo más visto
Según la marca de pintura Dulux, los distintos tonos de grises fueron los más vendidos en el año 2020. Vivimos en casas que parecen sacadas de un folleto de Ikea y que, en ocasiones, no dicen mucho de nosotros mismos.
Just compare a typical 1970s home to a modern designer home.
— The Cultural Tutor (@culturaltutor) July 26, 2022
While it is completely understandable if you don't miss the garish colours of bygone eras, it is interesting to note the change. pic.twitter.com/5cL6FPLwmI
¿Es tu casa o podría ser la de cualquier otro vecino? ¿Hemos dejado de vestir y decorar con todos los colores que nos gustaría por miedo a ser diferentes? Esto tampoco significa que tengas que empezar a hacer mezclas fantasiosas de cortinas (o sí), pero es interesante echar la vista atrás y ver cómo el color ha ido desapareciendo, también de las calles.
Los niños del futuro ya no podrán jugar a buscar coches amarillos, porque pronto no los habrá. Muestra de ello es el gráfico realizado por el usuario de reddit Feemiror, en el que se muestra la tendencia de la pintura de los coches en Polonia desde el año 1990 al 2020.
La tendencia, que bien puede extrapolarse a todo el planeta, muestra cómo en la actualidad un 70% de coches son negros, blancos o grises. En 1995, apenas el 45% tenían estos tres tonos, menos de la mitad. Un ejemplo perfecto que muestra evolución hacia unos gustos y un mundo más gris y monótono.