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El ciclo hormonal también existe en los hombres, y te está afectando más de lo que crees
"¿Los hombres tienen la regla?" Todo el mundo se ha hecho esta pregunta alguna vez, y toca resolverla. Sí, también existe el ciclo hormonal masculino, y puede afectar mucho.
| 20 Octubre 2022
Los cambios hormonales pueden afectar sobremanera a quienes los padecen. Cada vez es más común hablar sin tapujos de cómo la regla afecta a quienes la tienen de formas diversas, pudiendo ser incluso dolorosa y hasta incapacitante. Sin embargo, poco se conoce sobre su homónimo: el ciclo hormonal masculino. Este afecta a todos los hombres sin excepción en mayor o menor medida y no debe dejarse pasar por alto, pues puede llegar a afectar a la salud casi tanto como la menstruación en sus casos más graves.
Qué es el ciclo hormonal masculino y cómo se produce
Mientras que la menstruación se rige por la fluctuación de estrógenos y progesterona, el ciclo hormonal masculino está marcado por la producción de testosterona. Esta hormona es generada en los testículos y se encarga, entre otros, de la función sexual, el desarrollo de masa muscular y el crecimiento de vello. Se relaciona con el sistema nervioso central y el cerebro, quedando ligados de forma recíproca.
Así pues, observando la relación entre los picos de producción de esta y la frecuencia con la que se dan, se han perfilado hasta cinco tipos de ciclos hormonales en las personas con pene.
- Extracorto: también llamado Síndrome del Minuto de Testosterona (SMT). Consiste en alteraciones hormonales que duran unos 20 minutos. Se estima que es posible tener hasta seis o siete de estos picos en un solo día.
- Diario: Por la mañana, el nivel de testosterona es muy alto, situándose entre los 800 y los 1000 mg, motivo por el cual los hombres y personas con pene acostumbran a tener un deseo sexual alto en esta franja horaria. Esta cantidad baja a lo largo del día, llegando a estar en los 400 mg por la tarde, la mitad respecto a la primera hora del día.
- Mensual: el 60% de los hombres tienen un ciclo que dura en torno a los 8 y los 30 días. Cuando llega esa fecha, en vez de soltar un óvulo y sangrar, los niveles de testosterona aumentan y no tienen ningún vínculo con la reproducción.
- Anual: Es parcialmente cierto eso de que "la primavera la sangre altera", y es que con el aumento de horas de luz, suben también los niveles de oxitocina y dopamina, haciendo que la persona esté más dispuesta a la atracción sexual. Sin embargo, en cuanto a testosterona se refiere, el otoño es la estación en la que está en auge, y por tanto, cuando más deseo sexual tenemos.
- Vital: en función a su producción y cómo afecta vitalmente, se han marcado cinco etapas distintas del ciclo hormonal masculino, todas ellas con sus variantes hormonales: nacimiento e infancia, pubertad, madurez, adultez o paternidad y vejez.
¿Por qué deberíamos tener en cuenta todo esto y conocer cuál es nuestro ciclo hormonal? Porque unos niveles bajos de testosterona pueden tener consecuencias en nuestra salud física y mental. Es decir, que el ciclo no solo afecta el estado de ánimo de las mujeres, por mucho que ellas hayan tenido que cargar con ese mantra toda la vida.
¿Qué repercusiones puede tener la baja testosterona?
La testosterona influye en procesos biológicos mediados por el cerebro y su escasez puede producir alteraciones en el ciclo de sueño, irritación, depresión y, como es evidente, en la cantidad de líbido. Para dar nombre a toda esta serie de síntomas, el científico Gerald Lincoln, de la Unidad de Investigación Médica sobre la Reproducción Humana de Edimburgo, acuñó el término del "síndrome del macho irritable".
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Además, está demostrado que los hombres y personas con pene sufren, a partir de los 40 años, un descenso progresivo de sus niveles de testosterona, conocido como andropausia. Aunque su nombre recuerda a la temida menopausia, guarda muchas diferencias con esta. Mientras que durante la menopausia se detiene la ovulación y termina el periodo fértil, en la andropausia el proceso es más paulatino y la producción de espermatozoides no se acaba, aunque sí se reduce.
Conocida vulgarmente como la "pitopausia", esta no afecta con la misma intensidad a todos, pero puede llegar a manifestarse a través de los siguientes síntomas:
- Disminución del deseo sexual
- Cansancio
- Disfunción eréctil
- Pérdida de masa y fuerza muscular
- Depresión
- Alteraciones de la memoria y la concentración
- Anemia
- Aumento de la grasa en la zona abdominal
- Osteoporosis
- Insomnio