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El futuro de Christopher Nolan, ¿tan oscuro como su caballero?
Christopher Nolan está en un momento crucial de su carrera. Sus conflictos con las plataformas de streaming y su progresiva desconexión con un público que parece aguantarle cada vez menos desvaríos cinematográficos dejan al director en una situación complicada.
| 08 Mayo 2023
Christopher Nolan es, sin ninguna duda, uno de los directores más importantes ya no del cine contemporáneo, sino de toda la historia del cine. Sus películas despiertan todo tipo de sensaciones al espectador, y cuentan con un sello propio que las caracteriza, capaces de exportar tensión, acción e intriga a raudales, pero sobre todo quebraderos de cabeza. Venga, no me digáis que vosotros no habéis dicho alguna vez durante o al final de una película de Nolan las frases "me he perdido", "vaya rayada" o "¿alguien me explica lo que acabo de ver?". Es imposible olvidarse de películas como 'Origen' (2010), en la que los sueños se convierten en un juego, 'Memento' (2000), donde la memoria resulta ser tu peor perdición, o 'El truco final (el prestigio)' (2006), que tiene tanta magia como dosis de realidad.
Sin duda, Nolan nos ha regalado caramelos cinematográficos, y probablemente la mejor saga de un superhéroe en la gran pantalla. La trilogía de 'El Caballero Oscuro' fue el punto álgido del cine de Nolan, al demostrar su capacidad para llevar la calidad suprema al mundo de los superhéroes, y de paso rescatar de entre las sombras a un personaje vilipendiado a lo largo de muchas décadas.
Lejos quedan ya aquellos seis años (2008-2014) en los que Nolan encadenó 'El Caballero Oscuro', 'Origen', 'El Caballero Oscuro: la leyenda renace' e 'Interstellar', todas ellas aclamadas por la crítica y el público y recordadas con el paso del tiempo. ¿Por qué, entonces, hacemos este artículo poniendo en duda el futuro del genio británico?
Porque aquellos tiempos no volverán. Una década después de su Meca cinematográfica, la sensación es que el público, siempre encantado de participar una vez más en el juego de despreciar lo que antes admiraba, se ha cansado de él. Hay un desapego y una erosión evidentes con el director gestado con el paso de los años que pone en riesgo sus próximas películas, con las que se juega más de lo que parece.
La respuesta está en 'Tenet'
En realidad, el final de la época dorada de Nolan sucede tras 'Interstellar'. La esperadísima 'Dunkerque' dejó una sensación agridulce entre el fandom. Nadie puso en duda la calidad de la película, pero al venir de una serie de obras maestras encadenadas, las expectativas le jugaron una mala pasada a una película que estaba limitada por el hecho de ser una historia real. Sea como fuere, lo cierto es que 'Dunkerque' no ha terminado de envejecer del todo bien, viéndose eclipsada por otras películas de la misma temática bélica (aunque de guerras muy diferentes) como '1917'.
La vuelta de Nolan a la ciencia ficción llegaba en 2020 con 'Tenet'. El hype regresó, llegándose a catalogar como "la salvadora del cine", la película que devolvería a la gente a las salas por primera vez desde la pandemia. Pero no lo hizo, en parte porque la recepción de la cinta fue la peor desde que es un cineasta reconocido. La mayoría de las críticas iban en la misma dirección que la de Christy Lemire, periodista de Filmweek: "Soy una gran fan de las películas de Christopher Nolan y disfruto de sus puzles, pero 'Tenet' parece intencionalmente inaccesible y dificultosa que ninguna otra. Confusa, distante y fría".
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Evidentemente, 'Tenet' recibió también mucho apoyo, pero muchos la consideraron una película demasiado 'nolaniana', que en su pretensión por alcanzar la excelencia de anteriores obras ha terminado siendo una mera sombra de ellas. Eso, y que puede que el espectador ahora busque otro tipo de tramas en las que no necesite estudiar física para entenderlas. Los gustos del cine son muy cambiantes, quién sabe si el de la ciencia ficción tan compleja está ahora de capa caída. Aunque no sea de Nolan, la cuarta película de 'Matrix' nos ayudará a resolver esta duda.
Al menos hasta ahora, no podemos decir que 'Tenet' le haya salido bien al director. La cinta provocó una disputa entre Nolan y Warner Bros que acabó con su larga relación exclusiva. El motivo, la intención de Warner de estrenar simultáneamente sus producciones en las salas de cine y en las plataformas de streaming, algo contra lo que ya se había manifestado en contra un Nolan muy crítico con todo lo que tenga que ver relacionar cine y streaming.
Nolan consideró la idea de Warner una ofensa a los cineastas. Entendedor de un cine para las salas, un cine puro alejado del sofá, esta actitud de Nolan, por muy razonable que sea, no ayuda demasiado a reconducir su desconexión con el público, especialmente con el estadounidense, donde este debate está mucho más vivo. Hoy en día, las plataformas son el medio preferido para consumir contenido audiovisual, y el público se inclina más hacia ellas. La sala de cine no morirá, pero debe adaptarse a la convivencia con el streaming. También debe hacerlo Nolan.
¿Qué será del futuro 'nolaniano'?
Por supuesto, la gente seguirá yendo a ver una película de Nolan por ser Nolan. Se ha ganado el crédito para mantener ese estatus durante mucho tiempo. Pero tampoco debería confiarse ni situarse por encima del bien y del mal. La relación sólida que había en 2011 con los espectadores se resquebrajó en 2021, y al director todavía le debería quedar mucha carrera por delante.
Para evitar que en 2031 la situación sea insostenible, le tocará remar para enmendar la desconexión creciente del público para con sus obras. De momento, su próximo proyecto parece alejarse más de las líneas tan confusas de 'Tenet', sin perder su relación con la física. Será un filme histórico sobre el físico que desarrolló la bomba atómica, J. Robert Oppenheimer. Titulada precisamente 'Oppenheimer', se estrenará el 21 de julio de 2023 y contará en su reparto con personalidades como Robert Downey Jr., Matt Damon o Cillian Murphy, un clásico en la filmografía del británico, que interpretará a Oppenheimer. De primeras, la propuesta y el elenco prometen. ¿Será todo un éxito y devolverá a Nolan a la cima y la reconciliación, o por el contrario seguirá abriendo la brecha entre público y director?