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De performance artística a deporte mundial: historia del Chess Boxing, la unión entre el ajedrez y el boxeo
En esta nueva disciplina se puede perder de varias maneras: por K.O, por puntos... o por jaque mate. La combinación entre estos dos deportes ha cautivado a mucha gente a lo largo de todo el mundo, personas que quieren poner a prueba su resistencia física y su fortaleza mental. Desde 2003, lo que fue concebido inicialmente como un proyecto artístico, no ha parado de crecer.
| 17 Junio 2019
En 1996, Enrique Morente y Lagartija Nick publicaron 'Omega', un álbum que combinó el flamenco y el rock and roll a través de las letras de Leonard Cohen y Federico García Lorca. Se cumplen, por lo tanto, 23 años de aquel disco que revolucionó el flamenco y de la actuación en el Teatro Albéniz de Madrid en la que presentó el tema homónimo del álbum y que generó un enfado monumental en gran parte de la audiencia.
Aquello ejemplificó la reacción que, en ocasiones, suscita en el público la combinación de dos elementos que, a priori, pueden parecer distintos y alejados entre sí. De hecho, recientemente mucha gente asistió con perplejidad a la celebración de un partido de 'futbaile', es decir, la suma del fútbol con la danza.
Sin embargo, en 2003 se llevó a cabo una combinación de dos disciplinas deportivas que, a lo largo de estos últimos años, ha alcanzado un gran éxito. Hablamos del Chess Boxing, la unión del ajedrez con el boxeo, dos deportes que tienen más en común de lo que parece a primera vista.
De performance artística inspirada por un cómic...
En 2003, el artista holandés Iepe Rubingh decidió combinar ajedrez y boxeo. La idea no le vino así porque sí, sino que estuvo inspirado por el cómic francés 'Froid Équater' ('Frío Ecuador' en castellano), en cuya historia de ciencia ficción se describe la celebración de eventos deportivos donde dos púgiles, después de haber disputado un combate de boxeo, juegan una partida de ajedrez.
Al principio, esta unión fue concebida como un proyecto artístico. Rubingh explicó que un artista, cada vez que se dispone a realizar un trabajo, tiene que lidiar con un arduo proceso hasta encontrar la idea exacta con la que llevar a cabo su proyecto. Esta sensación es, según él, similar a la de un púgil que tiene que vencer a su rival en el cuadrilátero: "Presionas a tu oponente, y en el arte presionas la idea también. Como artista, tienes que ser radical. Como púgil, tienes que ser radical".
Aquel 2003 se celebró en Ámsterdam el primer combate de Chess Boxing entre el propio Rubingh y su amigo Jean Louis Veenstra. Rubingh, bajo el seudónimo de 'Iepe The Joker', se llevó el gato al agua, y su primer pensamiento tras convertirse en el primer campeón mundial de Chess Boxing fue: "¡Funcionó! ¡Hemos creado un deporte que puede extenderse por todo el mundo!".
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... a deporte internacional
Al año siguiente se creó la World Chess Boxing Organisation, y se fundó en Berlín, ciudad donde Rubingh había desarrollado todo su proyecto artístico, el primer club oficial de Chess Boxing, el Chess Boxing Club Berlín. Además, se establecieron las cuatro categorías de peso: Ligero, Medio, Semipesado y Pesado.
Desde aquellos años, este deporte comenzó a expandirse rápidamente. En 2008, el presidente de la Federación Internacional de Ajedrez, Kirsán Ilyumzhinov, participó en un combate de Chess Boxing, otorgándole un crédito muy importante a la híbrida disciplina que le ayudó en su difusión internacional.
Clubes de Chess Boxing han sido creados desde entonces por todo el mundo: Reino Unido, Italia, Turquía, Rusia, Irán, México, Estados Unidos, India, Francia... De estas asociaciones han surgido algunos de los luchadores mas importantes, como Nikolay Sazhin, Gianluca Sirci o Leonid Chernobaev.
Por otra parte, en España, si bien no existe ningún club oficial de Chess-Boxing, sí hay un representante del más alto nivel: Jonathan Rodríguez Vega se enfrentó en 2013 al alemán Sven Rooch durante el primer Campeonato del Mundo celebrado en Moscú, aunque acabó perdiendo el combate.
Reglas: se gana en el cuadrilátero o en el tablero
En el Chess Boxing descrito en 'Froid Équater', la partida de ajedrez se disputaba después del combate de boxeo. Como esto era inviable, Rubingh optó por alternar los asaltos pugilísticos con los del legendario juego de mesa. Bajo esta idea se desarrollaron las reglas del nuevo deporte:
- 11 asaltos en total, 6 de ajedrez y 5 de boxeo.
- Cada uno de los asaltos dura 3 minutos.
- Al sumar los asaltos de ajedrez 18 minutos en total, cada jugador dispone de 9 minutos para realizar sus movimientos. Si uno de ellos agota el tiempo, pierde el combate.
- Los luchadores pueden ganar el combate de las siguientes formas: por K.O. o por puntos durante los asaltos de boxeo, por jaque mate en los de ajedrez, por decisión arbitral o, como hemos descrito previamente, si uno de ellos se pasa de tiempo durante los rounds de ajedrez.
Con el objetivo de mejorar la concentración durante los asaltos de ajedrez, los púgiles se colocan audífonos insonorizados para evitar que el ruido externo, provocado tanto por el público como por el 'speaker' que va narrando el desarrollo de las jugadas en el tablero, les moleste.
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Dura combinación
La concentración es un factor muy importante en el Chess Boxing. Sin embargo, esta es distinta dependiendo de la disciplina: Jonathan Rodríguez reconoció que lo más difícil de este deporte es controlar los ritmos de los diferentes asaltos, pues la adrenalina del cuadrilátero impide pensar con claridad durante los rounds de ajedrez.
Conseguir controlar este elemento del Chess Boxing es el objetivo fundamental del deporte de Rugbingh. Los luchadores son conscientes de ello, y muchos de ellos diseñan sus estrategias con base en esta circunstancia: en 2008, Nikolay Sazhin reconoció tras vencer al alemán Frank Stodt, que su plan era llevar a cabo una táctica agresiva en los rounds de boxeo y una defensiva en los de ajedrez, para forzar errores en el tablero a su rival.
Diferencias separadas por la estrategia
Si bien Rubingh reconoce que "hay una gran diferencia entre comer una pieza y pegar a alguien", lo cierto es que la estrategia constituye el punto en común entre ambas disciplinas. Esto es evidente en el ajedrez: el Gran Maestro Internacional Garri Kasparov, afirmó que, cuando las tácticas desaparecen, estas no son otra cosa que la parte más simple de la ajedrez e incluso triviales en comparación con la estrategia.
En el boxeo, la estrategia es igualmente importante. Muhammad Ali venció a George Foreman en el 'Rumble in the Jungle', tras permanecer gran parte del enfrentamiento contra las cuerdas. Aquello, según el propio Alí, fue una decisión deliberada: "Pensabais que lo estaba haciendo mal (...) Estar contra las cuerdas es genial cuando el rival hace sus mejores golpes y sabes que no te está dañando".
En cualquier caso, lo importante es que el Chess Boxing constituye una opción más para practicar deporte y fortalecer tu cuerpo y mente, con todos los beneficios que ello conlleva: en la India, muchas mujeres consiguen evadirse de la dura realidad social a través de la disciplina creada por Rubgingh.
Su existencia es, por lo tanto, una gran noticia. Eso sí, no bajemos la guardia: cuidado con la reina y los ganchos del rival.