GQ
¿Por qué Brad Pitt se parece a todo el mundo (menos a Brad Pitt) en la portada de GQ?
Homelander, Ray Liotta, Chelsea Handler, John Cena... A todos esos y otros más se parece Brad Pitt en la portada de GQ. Al menos, más que al propio Pitt que conocíamos. Pero posiblemente, sea más real que nunca.
| 22 Junio 2022
La revista GQ ha realizado un extensa entrevista a Brad Pitt, en la que habla de su madurez personal a punto de ser sexagenario, y de su nueva faceta profesional, más interesado en producir que en actuar. La conversación de Ottessa Moshfegh, periodista y escritora, con el actor de Missouri, viene acompañada de un reportaje fotográfico realizado por Elizaveta Porodina, una de las profesionales más influyentes del sector, que no ha dejado indiferente a nadie.
Cada fotografía del reportaje tiene su historia, bien sea relacionada con el mundo del arte o con el de la cultura de los 60-70-80. También la tiene su portada, sin duda la pieza que más está dando que hablar. En dicha portada vemos a un Brad Pitt como nunca antes habíamos observado, con una tez pálida y las arrugas marcadas, y una mirada perdida bastante hipnótica. La camisa, las joyas al cuello, la salamandra y las flores que reposan a su alrededor sobre el agua completan un cuadro inspirado en un cuadro que muchos han catalogado de cuadro.
¿Es Homelander? ¿Es Ray Liotta? No, es Brad Pitt
No nos vamos a engañar. Nosotros también nos hemos quedado en shock al ver a Brad Pitt así, y también nos ha costado reconocerle. De hecho, si no fuera porque su nombre aparece en mayúsculas, tardaríamos en darnos cuenta de quién es, acostumbrados a verle... diferente.
El asombro es general, y los comentarios de la gente confundiéndole con otras personalidades no han tardado en aparecer. El más repetido, el recién fallecido Ray Liotta. La verdad es que, entre el gesto facial, la postura y el peinado, bien parece un extraño homenaje. Aun así, no son los únicos actores a los que se da más que un aire en esa portada: Rob Lowe, Chris Pine, John Cena... Todos los nombres que imagines están siendo comparados con el Pitt de la foto. Incluso una mujer, la comediante y actriz Chelsea Handler. Y la verdad, también se parece.
Lo más visto
La lista de parecidos, en realidad, abarca hasta el mundo de los superhéroes. Los hay con sentido del humor que le anuncian como el nuevo Joker del Snyderverse, en sustitución de Jared Leto. Pero, sobre todo, los hay que han confundido a Brad Pitt con Homelander de 'The Boys'. Desde luego, los dos tienen pinta de compartir un mundo interior intenso.
En realidad, a quien Brad Pitt quería parecerse es a Elizabeth Siddal
Y quién es esa, pensaréis. Se trata de la mujer que posó para el pintor inglés John Everett Millais en 1852 en el cuadro 'La muerte de Ofelia', interpretando precisamente a Ofelia, la noble enamorada del príncipe Hamlet, el personaje de William Shakespeare.
En otra de las fotos de la sesión, se hace todavía más patente la influencia. Aquí está la comparativa:
La historia de Elizabeth Siddal es, en realidad, tan dramática como la de Ofelia. El pintor quería plasmar un momento muy concreto de la obra, el de la muerte de Ofelia en el arroyo, por lo que Elizabeth tuvo que permanecer flotando en la bañera durante días con un pesado traje, aguantando las bajas temperaturas del invierno londinense. El esfuerzo le trajo una neumonía de la que nunca se recuperó por completo, lo que agravó sus problemas de salud mental que terminarían con su vida con solo 33 años.
¿Y si Brad Pitt solo se parece a un señor de 58 años?
Quizás natural por el frío que hacía en esa habitación, el gesto de Elizabeth Siddal en 'La muerte de Ofelia', donde prácticamente parece exhalar un último aliento mientras, con los ojos abiertos, se adentra en la muerte, captó a la perfección lo que Millais quería reflejar en su obra dedicada a la amante de Hamlet; y es la explicación del rostro excesivamente pálido y agrietado de Brad Pitt, así como de su mirada perdida.
Por tanto, ni el actor está al borde de la muerte ni parece un cadáver, como muchos se han apresurado a apuntar. Simplemente rinde homenaje a Elizabeth Siddal y a Ofelia. Pero, al margen del asombro inicial por encontrarnos a un Brad Pitt menos divino y más humano y frágil que nunca, la portada puede ayudarnos a romper de una vez el aura de eterna juventud que envuelve y agarrota al actor. Puede que el Brad Pitt que vemos en la foto de GQ no se parezca a Siddal, ni a Ofelia, ni a Ray Liotta, ni a Homelander. Puede que ni siquiera se parezca al Brad Pitt que todos conocíamos. Pero se parece a una persona de 58 años, que es la única realidad de Brad.